París, finales del siglo XIX. El pintor impresionista Toulouse-Lautrec, miembro de una familia aristocrática francesa, se apasiona por la vida bohemia de los bajos fondos parisinos y visita con frecuencia el mítico Moulin Rouge, un cabaret donde, mientras bebe, contempla a las sensuales bailarinas que bailan el can-can.
Privacidad y cookies: este sitio utiliza cookies. Al continuar utilizando esta web, aceptas su uso.
Para obtener más información, incluido cómo controlar las cookies, consulta aquí:
Política de cookies.