En la primavera de 1864, en plena guerra de Secesión norteamericana (1861-1865), 33.000 prisioneros de guerra son enviados a Andersonville, un campo de concentración de Georgia, donde viven hacinados en condiciones infrahumanas. Doce mil sucumbirán, y los demás lucharán denodadamente por sobrevivir a ese infierno.
Privacidad y cookies: este sitio utiliza cookies. Al continuar utilizando esta web, aceptas su uso.
Para obtener más información, incluido cómo controlar las cookies, consulta aquí:
Política de cookies.